Factcheckers

Conocer la verdad requiere esfuerzo.

Dra Angie González

En 1980, cuando entré a la Universidad, escuché por primera vez el concepto “revisionismo histórico”. Ese año yo acepté a Cristo como Salvador y empecé un camino de investigación personal sobre la Biblia y muchos otros temas. En ese momento que me di cuenta de que muchas cosas que creemos y que nos han enseñado como verdades oficiales, en realidad son mentiras.

La historia se reescribe y las definiciones se redefinen. Todos fuimos testigos de cómo la Organización Mundial de la Salud (OMS) cambió la definición de “pandemia” en 2009. Ya una pandemia no tiene que ver con la peligrosidad o mortalidad de un patógeno sino con la cantidad de contagiados aunque la enfermedad no sea grave.

El Centro para el Control de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) hizo lo propio cambiando la definición de “vacuna”. Esto ya no es un producto que inmuniza sino un producto que “provoca una respuesta en el sistema inmunológico”.

La verdad se reescribe para convertirla en la mentira que constituye la nueva verdad. Así hemos ido saliendo de la era posmoderna - en donde la verdad era relativa - para entrar en la era de la posverdad, en donde la verdad ya no existe pero todos creemos tenerla.

Eso que antes se llamó revisionismo ahora se llama “factchecking” o verificación de datos. El factchecking es – por así llamarlo - una profesión. En la página del International Fact-Checking Network (IFCN) ellos se definen como "campeón de las mejores prácticas e intercambios de información basada en hechos desde su creación en 2015".

El IFCN forma parte del Poynter Institute que recibe su apoyo financiero de la Fundación Koch, Craig Newmark Philantropies, Gill Foundation y The Washington Post, entre otras. A pesar de que alegan ser organismos dedicados a la transparencia y veracidad de la información – particularmente la información periodística – en realidad son organismos que representan a sus dueños; los grandes filántropos que invierten sus fortunas en transformar el pensamiento de la sociedad para conformarlo a sus ideologías políticas y sociales.

Estas personas y organizaciones se dedican a transformar el pensamiento libre en pensamiento de masas. Su tarea consiste en diseminar propaganda ideológica y censurar toda la información contraria.

El revisionismo siempre ha existido, solo que ahora es tecnológico. En una entrevista que Tucker Carlson le hiciera a Elon Musk en 2023, Musk dijo temer que la inteligencia artificial terminará convirtiendo a la tecnología en un espacio de corrección política.

En Juan 8:32 Jesús dijo a sus discípulos que la verdad les haría libres. Ese es un concepto medular: la verdad liberta, las mentiras esclavizan. Las mentiras que se publican a diario por los medios de comunicación tienen el propósito de controlar y esclavizar a las masas. La única escapatoria que tenemos es conocer la verdad.

Conocer la verdad requiere esfuerzo. Demanda que dejes de navegar sin rumbo por el mundo del entretenimiento tecnológico que han creado intencionalmente para esclavizarte. Requiere que huyas del espacio de fantasía virtual y penetres en el mundo de la realidad. Exige que te atrevas a pensar y desarrolles el gusto por la buena lectura y el análisis crítico.

Conocer la verdad requiere que encuentres referencias estables y confiables. La primera y más importante de ellas es la Biblia. La Biblia no es un cuento de camino. La Biblia contiene historia verificable y revelación de Dios. Pero, sobre todo, la Biblia te permitirá tener una relación con Dios mediante el Espíritu Santo que te “guiará a toda verdad” (Juan 16:13).

Busca en la sección de recursos recomendados donde te comparto títulos de libros y direcciones de fuentes que te ayudarán a buscar la verdad fuera de los factcheckers. Te deseo éxito en tu búsqueda de la verdad.